Patrocinado por PHPDocX

Síguenos en Twitter

Buscar en WikilleratO
   

La belleza natural y artística.

De Wikillerato

(Diferencias entre revisiones)
Revisión actual (09:13 5 may 2011) (editar) (deshacer)
 
(2 ediciones intermedias no se muestran.)
Línea 1: Línea 1:
-
Tradicionalmente se ha hablado de dos tipos de belleza
+
Tradicionalmente se ha hablado de dos tipos de '''belleza'''.
-
La belleza como perfección. Se deriva de la buena forma, de lo perfecto - eumorfé -, de ahí viene la palabra latina - formosus -, que da en castellano hermoso.
+
== La belleza como perfección ==
 +
 
 +
La belleza como perfección se deriva de la buena forma, de lo perfecto - ''eumorfé'' -, de ahí viene la palabra latina - formosus -, que da en castellano hermoso.
Lo feo es lo deforme, y lo bello lo que tiene armonía, simetría, la relación armónica de las partes entre sí y de las partes con el todo, así lo entendieron los artistas de la Grecia clásica, era la expresión de la racionalidad, equilibrio; una perfección formal, que podemos admirar en el Partenón y en la Acrópolis de Atenas.
Lo feo es lo deforme, y lo bello lo que tiene armonía, simetría, la relación armónica de las partes entre sí y de las partes con el todo, así lo entendieron los artistas de la Grecia clásica, era la expresión de la racionalidad, equilibrio; una perfección formal, que podemos admirar en el Partenón y en la Acrópolis de Atenas.
 +
== La belleza como pulcritud ==
También se ha entendido la belleza como pulcritud. La belleza no se encuentra tanto en la perfección, sino en el cuidado o la limpieza con que se presenta. Una casa es bella cuando tiene un aspecto de aseo y orden.
También se ha entendido la belleza como pulcritud. La belleza no se encuentra tanto en la perfección, sino en el cuidado o la limpieza con que se presenta. Una casa es bella cuando tiene un aspecto de aseo y orden.
-
 
+
== La belleza como verdad ==
En la historia de la filosofía se ha visto la belleza como la VERDAD misma.
En la historia de la filosofía se ha visto la belleza como la VERDAD misma.
Línea 45: Línea 48:
"Destocados y erguidos bajo el furor divino,
"Destocados y erguidos bajo el furor divino,
 +
a nosotros, poetas nos toca arrebatarle,
a nosotros, poetas nos toca arrebatarle,
-
con nuestras propias manos, el
+
 
-
rayo fulgurante
+
con nuestras propias manos,
-
a Zeus en persona, para, envuelto
+
 
-
en el canto,
+
el rayo fulgurante
 +
 
 +
a Zeus en persona, para,
 +
 
 +
envuelto en el canto,
 +
 
hacer llegar al pueblo este don
hacer llegar al pueblo este don
 +
Celestial".
Celestial".
 +
 +
[[Categoría:Filosofía]]

Revisión actual

Tradicionalmente se ha hablado de dos tipos de belleza.

La belleza como perfección

La belleza como perfección se deriva de la buena forma, de lo perfecto - eumorfé -, de ahí viene la palabra latina - formosus -, que da en castellano hermoso. Lo feo es lo deforme, y lo bello lo que tiene armonía, simetría, la relación armónica de las partes entre sí y de las partes con el todo, así lo entendieron los artistas de la Grecia clásica, era la expresión de la racionalidad, equilibrio; una perfección formal, que podemos admirar en el Partenón y en la Acrópolis de Atenas.

La belleza como pulcritud

También se ha entendido la belleza como pulcritud. La belleza no se encuentra tanto en la perfección, sino en el cuidado o la limpieza con que se presenta. Una casa es bella cuando tiene un aspecto de aseo y orden.

La belleza como verdad

En la historia de la filosofía se ha visto la belleza como la VERDAD misma.

En la filosofía antigua, Platón identifica el bien, la verdad y la belleza como lo absoluto e incondicionado. Sólo puede alcanzarse su contemplación a través del conocimiento y la ciencia. Es la dialéctica de las ideas que las hace participar de la verdad y belleza de la idea del bien. De ahí la eternidad del arte.

En la filosofía medieval la belleza platónica absoluta se identifica con Dios: Su poder e irradiación ilumina tanto a la naturaleza haciéndola bella, como al entendimiento humano haciéndole conocer la Verdad y despegando su espíritu de lo material e imperfecto. Los autores más importantes son - salvando las distancias de siglos -, San Agustín del s. V y Santo Tomás del siglo XIII. San Agustín insiste en la iluminación e irradiación de la verdad y belleza divina, y Santo Tomás unifica la contemplación de la belleza de Dios con la máxima felicidad a la que tiende la persona humana. Para Santo Tomás toda la ciencia y el arte nos llevan a Dios, fuente de belleza y verdad.


En la filosofía contemporánea, desde otra perspectiva diferente de la medieval, Martin Heidegger - importante filósofo existencialista alemán -, afirma que la verdad se desvela en el arte.

En la obra de arte encontramos puesta la verdad que Heidegger expresa con la metáfora de la luz. Escuchemos sus palabras en el capítulo "Arte y poesía" de su obra El origen de la obra de arte.

"La luz así modelada entraña su resplandor en la obra. El resplandor entrañado en la obra, es lo bello.

La belleza es un modo como es esencialmente la verdad".


La belleza pertenece a la esencia de la verdad que se manifiesta a través de la obra de arte. Y en otro texto del mismo libro nos dice:

"Uno de estos modos, como la verdad acontece, es el ser de la obra de arte. La obra de arte expone un mundo y produce la tierra. La obra es la controversia de aquella disputa en la que se conquista el desvelamiento del ente en el todo, la VERDAD".

Vamos a traducir este difícil juego de palabras, del español al español - que antes fueron traducidas del alemán al español -:


En síntesis podemos decir que el pensamiento de Heidegger sobre el arte, es que la verdad está en la obra de arte. En ella el ser aparece y se oculta al mismo tiempo y nos deja emocionados, elevados por la luz de la verdad que despide la obra de arte y la noche de nuestra vida cotidiana compuesta de pequeñas cosas.

En la obra de arte brilla la verdad, como un destello de sol en el amanecer cuando se disipan las sombras de la noche.


La mejor definición de belleza es sin embargo, la experiencia directa que cada uno podemos tener en la contemplación y admiración de la misma.

Ya los antiguos al hablar de la inspiración del artista lo expresaban simbólicamente como un arrebato o posesión divina, reflejando así, la elevación del espíritu que proporciona la experiencia estética, que puede llevar a una creación artística o agotarse en la pura contemplación y admiración.

Hölderlin - poeta romántico alemán - describe la inspiración del poeta como algo divino:


"Destocados y erguidos bajo el furor divino,

a nosotros, poetas nos toca arrebatarle,

con nuestras propias manos,

el rayo fulgurante

a Zeus en persona, para,

envuelto en el canto,

hacer llegar al pueblo este don

Celestial".

   
 
ASIGNATURAS
MatemáticasFísicaQuímicaBiologíaDibujoHistoriaLengua y LiteraturaHistoria del ArteFilosofía
Creative Commons License
Los contenidos de Wikillerato están disponibles bajo una licencia de Creative Commons.
Pueden utilizarse y redistribuirse libremente siempre que se reconozca su procedencia.